
2018
Me enoja profundamente la gente que cree que uno no puede y no debe cambiar. Lo critican todo, critican a sus amigos, compañeros, hasta a personas que no conocen y ni se miran ellos: estancados y sin brillo en los ojos y ganas de avanzar.
Es inevitable cambiar si las situaciones que vivimos no son las mismas de antes, si el trabajo es diferente, si los amigos no son iguales. Es inevitable cambiar si uno se siente diferente. Entonces pretenden que siga siendo la misma persona que conocieron hace cuatro años. No tiene sentido ser la misma persona viviendo experiencias diferentes. No tiene sentido ser la misma persona con gustos distintos.
Hace dos años para acá siento que he cambiado tanto, que las cosas que me gustaban y que prefería, que quería, ya no son las mismas. Siento que la música no la escucho de la misma manera, los amigos no los quiero de la misma manera. Siento que quiero diferentes cosas. Y no es para menos, después de tiempos de felicidad, de dolor, esperanza y amor; la vida nos hace cambiar.
La vida nos hace cambiar, las circunstancias y ese debería ser un reto personal: conocerse y cambiar de tal manera que pueda hablar de experiencias, situaciones y personas que lo transformaron en alguien más fuerte.
22 Enero, 2018